Carpintero Gigante

Campephilus magellanicus

Longitud total: 430 mm. Sexos diferentes. Macho: pico gris pizarroso; iris amarillo verdoso; cabeza, copete y cuello, hasta la mitad de su longitud, rojo bermellón brillante. Base del cuello y coloración de las partes dorsales y rectrices, enteramente negro que, en el dorso y pecho anterior tiene reflejos azulados. Cobertoras alares negras con reflejos azulados; primarias y secundarias negras, que presentan en su vista dorsal el vexilo externo negro, el interno es negro menos en su base, que es blanca; este color, en la base del vexilo interno de las remeras, es cada vez más amplio, hasta tornarse casi dominante en las secundarias más proximales, con excepción del ápice, que es negro; las cobertoras subalares del borde flexor del ala son negras, el resto de las cobertoras subalares y axilares son de color blanco; en su vista ventral, las remeras tienen base enteramente blanca; posados presentan dos bandas blancas longitudinales, debido a que las terciarias son blancas en el vexilo interno y parte del externo y quedan a la vista. Patas grises.

La hembra tiene la cabeza totalmente negra con brillo azulado, con excepción de las plumas que cubren la base del pico, que son de color rojo; el resto de la coloración es idéntica a la del macho; el copete de plumas que lucen las hembras es largo y recurvado, mientras que en el macho estas plumas son mucho más cortas. Los machos juveniles no tienen la cabeza enteramente de color rojo; algunos ejemplares adultos presentan las bandas longitudinales blancas de las terciarias con barras de color negro. Inconfundible por su gran tamaño y coloración, el Carpintero Negro Gigante es la especie de mayores dimensiones de todos los integrantes de la familia Picidæ que viven en América del Sur y una de las aves más típicas y representativas de los bosques subantárticos. Puede verse casi siempre en parejas o pequeños grupos de 3 a 8 individuos que recorren los bosques, principalmente de árboles del género Nothofagus (lengas, coihues, ñires y otros); es poco frecuente su presencia en especies arbóreas de otro tipo. Su grito es fuerte y el golpeteo de su pico contra los palos puede oírse a mucha distancia; se alimenta de larvas de una gran variedad de coleópteros xilófagos que parasitan tanto árboles vivos como muertos, según las distintas especies; recorre los bosques volando de un árbol a otro, se posa en su parte media y sube por los troncos y ramas dando saltos y revisando todo minuciosamente; en contadas oportunidades baja al suelo para alimentarse, también suele hacerlo en troncos caídos. Su potente grito se escucha con más frecuencia momentos antes de que se lance a volar o cuando ya se desplaza en pleno vuelo; como no siempre grita y la intensidad del ruido de los golpes sobre los troncos depende del estado de éstos –es decir, si están verdes o secos–, para descubrirlo en los grandes y silenciosos bosques es preciso andar lentamente y escuchar con mucha atención; cuando detectan la presencia de intrusos se suelen correr, de un salto, al lado opuesto del tronco donde se hallan y, permaneciendo en silencio, pasan desapercibidos.

Para volar casi siempre despegan desde las ramas más altas y, luego de recorrer un corto trecho, se posan verticalmente sobre un árbol cercano; cuando localizan por medio del oído alguna larva que se encuentra dentro de la madera, comienzan a perforar ésta con su poderoso pico; ocasionalmente, se corren de un salto al lado contrario de donde comenzaron su arduo trabajo y efectúan unos pocos y potentes golpes, para después regresar y continuar hasta que su larguísima lengua alcanza a su presa. Los bosques donde habitan se reconocen por la gran cantidad de cicatrices que les provocan a los árboles cuando buscan su alimento.

Nidifican en huecos que excavan en los troncos, donde ponen hasta 4 huevos. Afortunadamente la población de esta especie es todavía bastante común, aunque la presencia y la actividad humanas y los grandes incendios que afectan año a año los bosques que conforman su hábitat con seguridad la perjudicarán seriamente.

Su distribución abarca desde Neuquén hasta el sur de Tierra del Fuego, dentro de los límites de los bosques andino-patagónicos; en Chile, se lo encuentra desde Curicó hasta la Tierra del Fuego chilena.

Fuente: Manual ilustrado de Aves de la Patagonia
Gentileza Familia Kovacs

Familia: Campephilus magellanicus

Nombre común: Carpintero Gigante

Nombre científico: Campephilus magellanicus

Distribución Geográfica

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